
Un pequeño proyecto personal floreció hasta convertirse en un santuario para la naturaleza, el arte y los animales.
Empieza el Sueño
En plena pandemia, una decisión cambió todo: dejar atrás el asfalto y el encierro para volver a la montaña, a las raíces, al olor a eucalipto, a pino y a la libertad.

Una cabaña en forma de “Tipi
Su estructura estaría sostenida por 12 soportes, en honor a los apóstoles de la fe católica.

Un poco de jardinería no va mal
“Ahí no crece nada”.
Pero con temple y dedicación, las flores comenzaron a abrir paso entre las piedras, llenando el lugar de colores y aromas.

Terminamos la cabaña... ¿y ahora?
La primera meta estaba cumplida. La cabaña se alzaba firme entre los árboles.
¿Cuál será el siguiente paso?

Unas gallinas para tener huevitos
Entre risas y sencillez, llegaron las primeras habitantes del lugar.
Pequeños comienzos que alimentaron un sueño más grande.

¿y si restauremos la casa paterna?
Nació una nueva idea: restaurar la vieja casa familiar.
Muchos pensaron en derribarla y empezar de cero, pero la decisión fue otra: rescatarla con esfuerzo y trabajo duro.

Un retraso: las cosas no avanzaban bien
El cansancio, la falta de recursos y el clima jugaron en contra.
El sueño parecía estancarse, pero rendirse no era una opción.

Se retoma el buen rumbo.
Con nuevas fuerzas y esperanza renovada, el trabajo volvió a tomar ritmo.

Esto está muy bonito, deberían mostrarlo
Las primeras visitas dejaron un mensaje claro: el lugar tenía algo especial, algo que debía compartirse con más personas.

Si ya tenemos gallinas, podemos tener marranitos y conejos.
Siempre nos han encantado los animales; sus alas, sus trompitas y sus sonidos llenan el lugar con una magia incalculable.
Muchas veces bastaba verlos comer para alegrar el día.
Queríamos compartir esa alegría con todos los visitantes.

Nace el Parque Ecológico El Rincón
De un sueño y mucho trabajo nació oficialmente el Parque Ecológico El Rincón.
Un espacio donde el arte, los animales y la naturaleza se encuentran.

